Por: Javiera Acuña
Ronald van der Kemp es un diseñador de moda holandés, fundador de su marca homónima llamada RVDK, Ronald van der Kemp. Graduado de la Academia de Arte y Diseño Gerrit Rietveld en Amsterdam en 1989.
Su carrera lo llevó a vivir en París, Milán y Nueva York trabajando por 25 años como director creativo, consultor y diseñador en jefe para marcas como Bill Blass, Barneys New York y Guy Laroche (donde sucedió a Elbar Albaz). Llegando también a trabajar junto a Michael Kors como diseñador en jefe de prêt-à-porter de Celine.
En agosto de 2014, Van der Kemp lanzó RVDK, presentando su primera colección en el París Fashion week de 2015. Con un discurso fuerte y rechazando las formas derrochadoras de la industria de la moda, propuso piezas de edición limitada, atemporales, elaboradas éticamente por medio de reciclaje textil con materiales de alta calidad y hechas a mano en pequeños talleres en Amsterdam.
La misión de RVDK desde un comienzo fue mostrarle al mundo que la moda ética puede ser glamorosa y emocionante, afirmando que una forma de arte puede cambiar su comportamiento, como también lo puede llegar a hacer la industria completa, si se lo propone. Dejando en claro que no sólo importa la belleza sino que lo más importante es nuestro planeta.
Este año, a pesar de la pandemia la marca presentó su colección con modelos emergiendo de los balcones de un hotel de lujo desierto en el centro de Amsterdam. Donde el diseñador declaró “Vemos que los cielos son más claros, florece la naturaleza e incluso salen animales salvajes. Las limitaciones de estos tiempos alimentan nuestra imaginación, obligándonos a reimaginar el futuro, haciéndonos conscientes de nuestra relación destructiva con el planeta » concluyendo con la reflexión: «Es hora de reconsiderar nuestra industria y cómo está participando en un mundo que enfrenta una tremenda crisis».
La última colección de éste diseñador nos deja apreciar por medio de las siluetas y colores, que los años ochenta fueron una clara inspiración para Van Der Kemp, como también representan su década de formación. Plasmado en sus mangas abullonadas, lunares, sastrería de colores vibrantes y la presencia de siluetas que juegan con el volumen. Pero más importante aún, el vestuario de este diseñador nos demuestra que si se puede generar cambios en la industria de la moda desde el ejemplo y que las marcas de lujo SI pueden ser sustentables de diversas maneras, inclusive a través del reciclaje de materia prima.
