Por Mijal Ehrenfeld
Una vez en el auto iba escuchando una lista en Spotify que en su mayoría era techno y comenzó a sonar una canción muy distinta a las otras. «Esto no es techno», pensé. Empezaba suave, más aguda y lenta que las demás. Era como esas canciones electrónicas que las puedes bailar pero te da más la sensación de escuchar la melodía, cerrar los ojos y sentir el viaje de emociones que te evoca (aunque eso lo puedes hacer con el resto de la electrónica si te gusta, pero esta no tenía ese bajo que te revienta). Era como esas que son más sentimentales y la bailas moviendo lento los brazos, nadando. Revisé el celular para ver qué era. Se llamaba «Loner» de Burial.
Me llamó la atención el sonido y melodía de esa canción. La encontré muy emocional. Me metí al perfil y empecé a escuchar el EP. «¿Qué es esto?» Me dije. Es como nostálgico. Amo. Busqué en internet sobre Burial y salía que es británico y autor de uno de los discos más influyentes de la música electrónica que se llama Untrue, del 2007 (eso es hace más de 10 años), y que habían solo dos imágenes de él en internet y al comienzo nadie sabía quién era. Había dado unas pocas entrevistas y parece que nunca ha hecho shows en vivo. Lo clasifican en el género drum and base, garage y dubstep.
Desde que lo descubrí no lo solté. Me escuché toda la discografía de Burial: ambos discos, el famoso y aclamado por todos, Untrue (2007), y Burial (2006). También escuché los 13 EPs del cual mi favorito sigue siendo Kindred, que es donde está la canción con la que lo descubrí: «Loner». Para finalizar la era de los 2010s, hace unos cuatro meses en diciembre de 2019, Burial sacó un álbum que reúne canciones seleccionadas de sus EPs que publicó desde el 2011 hasta el 2019, llamado Tunes 2011-2019.
Fue esta compilación de temas que me motivó a escribir lo que me estaba causando su música: un deseo de expresar las emociones y pensamientos que me afloraban, y el efecto que han tenido en mí el último tiempo. Voy a escribir sobre cómo fue construido este disco en particular: cómo Burial ordenó las canciones y la experiencia emocional que me causó esa selección de tracks. No voy a escribir sobre Untrue porque ya hay incontables análisis sobre ese disco, además que quiero hacerlo más personal que técnico. Y advierto que lo que se viene está plagado de opiniones muy emocionales, que pueden generar discusión o bien puedo estar equivocada, pero me gustaría compartirlas.
La música de Burial es como para escucharla cuando estás nostálgica, taciturna. Siempre que lo pongo es cuando quiero reflexionar sobre algunas cosas, darles una vuelta distinta o ver hacia qué emociones me lleva que quizás tengo un poco enterradas. Lo veo como un refugio emocional. Al menos eso ha sido Burial para mí: una especie de terapia. Por ahí leí que es música para escuchar en un día nublado o de lluvia, porque además en muchas canciones escuchas gotas cayendo. Incluye bastante ese típico sonido que hace la aguja de un tornamesa al empezar a reproducir un vinilo. También tiene muchas referencias a sonidos de ciudad, como si estuvieses parado en un puente en medio de una autopista de autos y escuchas todo tipo de ruidos metálicos. Leí que hay muchos samples de juegos de computador en sus canciones, y bueno en Untrue se cacha que samplea canciones pop de los 2000s de Usher, Christina Aguilera, Beyoncé y más. Les cambia el tono a uno más agudo o mucho más grave y aumenta el tempo. Hay otros samples que no sé de dónde son, quizás películas, pero las frases que selecciona, de lo que me he fijado, es que tienen mensajes de consuelo.
Encontré un artículo muy bueno en Pitchfork escrito por un periodista musical británico que me encanta, Simon Reynolds, que obviamente tenía que haber escrito algo sobre el disco más importante de Burial. Ahí dice algo que me llamó mucho la atención, porque fue justo lo que sentía y lo que me provocaba escuchar las canciones de este misterioso sujeto:
«For people respond to Burial’s work in a way that is different o anybody else in dance music (…). Fans testify in a much more alternative-rock way about how his tunes ‘saved my life’. The sound of Burial has touched people, opened them up to difficult emotions, hurt them in valuable ways.»
Que en español es:
«Las personas responden al trabajo de Burial de una manera distinta a la de cualquier otro artista en la música dance (…). Los fans testifican de una manera mucho más alternativa sobre cómo sus canciones ‘salvaron mi vida’. El sonido de Burial ha tocado a las personas le ha abierto emociones difíciles, los ha herido de maneras valiosas.»
Quiero recalcar una de las cosas que dicen los fans sobre la música de Burial: «opened them up to difficult emotions», «ha abierto emociones difíciles». ¡Esto es justamente lo que me pasa cuando lo escucho! Hay canciones en donde siento que se me paran los pelos o siento una subida como si algo estuviese creciendo dentro de mí que no tenía muy a flor de piel. Esa sensación de que algo está despertando la tuve mucho más intensamente cuando escuche su último disco entero (Tunes 2011-2019) y es por cómo Burial ordenó las canciones en ese compilado.
Este álbum es especial creo porque está armado como un set. Existen transiciones perfectas, siendo casi imperceptible el cambio de una canción a otra en algunas ocasiones. Es como si hubiese lanzado los temas a lo largo de la década, sabiendo perfectamente cómo los iba a unir después, pensando en el viaje en el que te inmersa este disco. Para el comienzo, que es bien largo, Burial seleccionó canciones que no tienen bajo alguno. «State Forest» y «Beachfires» ambientan la atmósfera lentamente con sonidos ambientales distópicos, acompañando en el fondo ese sonido que hace la aguja en un vinilo. De hecho, estas canciones son muy parecidas, donde aplica esa transición imperceptible de la que hablé antes. La música de estos tracks se asemeja a los cantos de las ballenas, haciendo que al mismo tiempo te dé la sensación de que algo está despertando, creciendo o intensificándose. He pensado que estas canciones fueron perfectas para empezar el disco, porque te invitan a entrar a esa atmósfera, al viaje, al mood profundo.
Sigue «Subtemple» que rompe con la melodía de las canciones anteriores. El efecto del sonido de la aguja en el vinilo es más intensa y suena más fuerte. Se escuchan las primeras vocales modestas del disco, acompañadas de un efecto del que da la sensación que se le está dando cuerda a algún objeto. «Young Death» sube el tono levemente con vocales que dicen «I will always be there for you». Si eso no es una invitación a sensibilizarte contigo mismo, no sé qué es.
Con «Nightmarket» ya la melodía comienza a ser más rápida, y es como si se estuviesen activando distintos circuitos para empezar a despertar otras sensaciones y lanzarte de lleno con «Hiders», una canción que tiene un sonido esperanzador acompañado con unas vocales que dicen «you don’t have to be alone». Pero este track en el último minuto cambia drásticamente de forma. Se escucha un sonido como si se estuviese retrocediendo algo y vuelve lo distópico de las primeras dos canciones del disco con una frase que es el nombre de la canción que viene después: «Come Down to Us».
La transición aquí también es perfecta. Y esta canción es una de las más conocidas de Burial porque es hermosa. Empieza con un sample de una frase que dice «Excuse me, I’m lost» como si ese quiebre del final de «Hiders» nos hubiese leído la mente y la canción está llevándonos justo donde Burial quería invitarnos: ahí abajo, en lo más profundo de nosotros. Quizás por eso la canción se llama «Come Down to Us», para que vayamos ahí juntos. De vez en cuando suena «do you feel alive?», «don’t be afraid», «this is the moment when you see who you are», «down in my heart… this is just you» y, por supuesto, el nombre de la canción. Es como un momento de aceptarte a ti mismo y quererte, de estar en bienestar, de «just to be you» como dice una vocal de repente. Es emocionalmente significativa la canción porque el mensaje va por la idea de la prevención del suicidio y el amor propio. Esto se confirma por cómo termina el track: con un «you are not alone» y una grabación de una declaración catártica de una mujer trans en la que señala que es digna de amor por ser tal como es.
«Without examples, without models, I began to believe voices in my head… that I was a freak, that I am broken, that there is something wrong with me, that I will never be lovable.
Years later I found the courage to admit that I am transgender, and that does not mean that I am unlovable.
So this world that we imagine in this room might be used to gain access to other rooms, to other worlds, previously unimaginable.»
Que en español es:
«Sin ejemplos, sin modelos, comencé a creer voces en mi cabeza… de que era rara, de que estaba rota, de que algo andaba mal conmigo, de que nunca iba a ser amada.
Años después encontré el coraje para admitir que soy transgénero, y eso no significa que no sea digna de ser amada.
Entonces este mundo que imaginamos en este cuarto puede ser usado para dar acceso a otros cuartos, a otros mundos, antes inimaginables.»
En mi opinión, esa última frase sobre los cuartos y mundos se podría asemejar a la idea del nombre de la canción, quizás. Aceptar esa invitación para admitir ciertos aspectos de ti misma y quererte en un mundo diverso donde quieres y puedes encontrar tu lugar.
El grupo de canciones que siguen dan la sensación de que Burial ya aceptó que estás cómodo y listo para aceptar lo que se viene. «Claustro» quiebra con las transiciones limpias que el disco presentaba hasta ahora, siendo un track más rápido que los anteriores. La conocida «Rival Dealer» la sigue, con un sonido un poco trance de fondo, en donde también presenta frases de consuelo como «I’m gonna love you more than anyone». Después vienen las canciones del EP Kindred, el mejor en mi opinión y en el de la crítica aparentemente. «Kindred», que tiene una base muy garage y pausas que te suben y bajan, te acompaña con la frase «baby you can find the light». «Loner» que juega con hacerte bailar, pero dentro de una burbuja exquisita. «Ashtray wasp» que es como una oda nostálgica al euro disco o euro dance, en mi opinión. Una especie de robot o alien te habla en «Rough Sleeper» y ya al final empieza a bajar las revoluciones de esta tanda de canciones con un tempo más bajo.
«Truant», «Street Halo» (una de mis favoritas) y «Stolen Dog» van aterrizándote con bajos importantes y melodías melancólicas para lentamente ir reinsertándote a la realidad y anunciándote el final del álbum con las palabras «me and you know, this is love» en «NYC».
Este ambiente que genera Burial en este disco es bastante especial. Es como si quisiera sacar a la luz esas emociones enterradas que tenemos y darnos cuenta de muchas cosas. También me llama la atención que el disco compile canciones de la década, época en que el tema de la salud mental ha agarrado mucha fuerza y relevancia. Creo que queda claro que Burial busca hacer sentir que las personas se sientan acompañadas con las frases que incluye en sus canciones («Come Down to Us» es un claro ejemplo) y con su música nos da un empujón a que se abran esas «emociones difíciles» de las que habló Reynolds. Al menos a mí me ha servido para eso, y me refugio en sus bellas creaciones, saliendo cada vez más renovada y a gusto conmigo misma.
*Este es el artículo de Simon Reynolds en Pitchfork sobre Untrue que hago referencia: https://pitchfork.com/features/article/why-burials-untrue-is-the-most-important-electronic-album-of-the-century-so-far/
*La lista de Spotify que estaba escuchando al descubrir Burial era «We Are Not Alone» de Ellen Allien. Máxima que me ha hecho descubrir muchos artistas.
*Mi canción favorita de Burial sigue siendo «Loner» (2012), pero entre esas está «U Hurt Me» de su álbum del 2006, «Street Halo» (2011), «Kindred» (2012) y «Raver» de Untrue (2007).