Por. Javiera Acuña
Durante toda la historia del vestir, la moda ha representado fantasía, aspiración e imaginación y como tal, se ha ido adaptado al pasar del tiempo. Hoy en día la tecnología está totalmente inserta en nuestras vidas y muchas veces pasamos mucho más tiempo sumergidos en un espacio digital que en otras actividades. Debido a ello, los distintos rubros y la vida en sociedad se han ido actualizando a toda velocidad.
Así fue como el año 2017 vimos nacer a la Primera supermodelo digital, «Shudu», creada meticulosamente usando tecnología de diseño en 3D por Cameron-James Wilson, quién fue fotógrafo de moda durante 10 años, sin embargo no se sentía satisfecho creativamente, lo que lo empujó, como amante de la ilustración y la moda a crear a Shudu.
Cameron nunca pensó en el éxito que tendría, ni menos que al día de hoy, la modelo digital habría sido protagonista en revistas de moda, encabezado campañas de alta costura y obtenido 203.000 seguidores en Instagram y contando.
Si bien, esta modelo fue la primera de su tipo, está lejos de ser la última ya que tuvo mucha aceptación en la industria y hoy Wilson dirige la primera agencia de modelos digitales del mundo, The Diigitals. Las marcas de lujo, como Balmain, han comenzando a adoptar un camino digital y hemos podido ver campañas protagonizadas por modelos digitales que cada vez se vuelven más comunes.
Y Chile no se quedó atrás, ya que esta semana fuimos testigos del lanzamiento de Revistelacalle11, donde para nuestra sorpresa de la mano de Marité Aravena, artista digital Chilena, la revista de VisteLaCalle lanzó la primera portada Latinoamericana con una modelo 100% digital. Disponible en su página web de manera gratuita.
Sin embargo, hay un gran tema en esta nueva era y avance digital, debido a que estos estándares de belleza son imposibles de lograr, lo que es claro, al no ser cuerpos reales. La pregunta es… ¿La incorporación de modelos digitales, diseñados con características perfectas y proporciones inalcanzables, serán perjudiciales? O el hecho de saber concretamente que no se trata de modelos reales hará que las personas automáticamente sean menos propensxs a compararse con elles?.
Cualquiera sea su opinión sobre la moda digital, las personas, la ropa, etc, algo claro es que la industria está cambiando, incluida la local. Y lo digital, de la mano de sin duda, grandes artistas que logran darle vida a estas animaciones, tienen y tendrán un papel protagonista en el futuro de la moda.
