Las uñas extra largas, las prendas fluor, el lipgloss exagerado y el baby hair que llevan las bloggers y artistas del momento nacieron en los suburbios de los 80 y las llevaban personas que fueron ridiculizadas y discriminadas en su momento.
Antes que Kim Kardashian, Rosalia, Dua Lipa y muchas otras artistas ocuparan este estilo, Florence Griffith-Joyner, AKA Flo Jo, corrió una carrera en 1988 que batió 3 records mundiales en los 100 metros en EEUU, récord que al día de hoy se mantiene.
No obstante la noticia tuvo igual o menor impacto que la manicure usada por la corredora en el evento. Tal fue la magnitud de esta situación que distintos medios tildaron de repugnante y repulsivas las uñas de Flo Jo, comentando sobre lo diferente de su apariencia con otras competidoras, enfatizando de manera sutil las diferencias raciales.
El Chicago Tribune señaló cómo la maratonista usó uñas curvadas de 4 cms en animal print y una manicure fucsia al día siguiente. Esto se contrapuso con la moda blanca heteronormada que imponía colores pasteles, nudes y uñas francesas en las manos de las mujeres, llevándola al enjuiciamiento y repudio social.
Flo Jo creció en los suburbios de Los Angeles, de familia humilde, Florence comenzó a trabajar desde temprana edad insertándose en el mundo de los salones de Nails Art locales, lugares en dónde desarrolló su afición por las uñas largas y decoradas.
Las décadas siguientes el hip hop comenzó una ola cultural con peinados, maquillajes, looks y uñas extravagantes.
Lil Kim, Missy Elliot y Mary J Blige son icono de este movimiento. Las artistas usaron sin miedo y transformaron toda visión negativa de estos «Looks de Ghetto», llevándolos a otro nivel, un nivel en dónde la opulencia es totalmente Glam.
Si nos adentramos en la historia de las uñas y el uso de ellas por parte de otras culturas podemos remontarnos a dos épocas de la antigüedad, la egipcia y la cultura China. En ambos casos las uñas eran utilizadas para demostrar estatus, para distinguir clases sociales; las uñas pintadas de rojo nos hablaban de una persona de gran importancia jerárquica a diferencia de las personas con las uñas pintadas neutras o nude.
En la dinastía Ming y Quing de la antigua china el largo de las uñas indicaba el poder de la persona, mientras mas largas significaba que menos cosas debían realizar, lo cuál se traducía en que mas sirvientes tenían para que realizaran sus quehaceres.
Hoy por hoy la cultura Kardashian y el Trap han traído de vuelta esta tendencia. Rosalia, Bad Gyal, Paloma mami y Bad Bunny deleitan al mundo entero con el uso de las uñas acrílicas, largas y despampanantes, adjudicándose términos como innovadores, visionarios.
Sin embargo la verdad es que todo lo que hagan ya fue utilizado en décadas anteriores, estos estilos nacieron en la marginalidad, en lugares dónde ser auténtico y creativo es tu único escape de una realidad menos colorida y exuberante.