Por. Marcelo Cardespi
Un filme que refleja la vida de la reina más odiada de la corte francesa por la famosa frase que jamás salió de su boca y que de cierta manera la identificaba como una niña mimada y sin empatía hacia su pueblo por el hambre que sufría la clase más pobre de la época «SI NO TIENEN PAN, QUE COMAN BRIOCHE» ( pan dulce elaborado con huevo, leche, mantequilla y azúcar).
Sofia Coppola nos lleva a un mundo de ensueño, retratando a MariA Antonieta como una party girl 24 horas y es así como esta película resulta atractiva para una generación o para quienes nos gusta admirar una vida llena de placeres y excesos. Coppola no se equivoca en elegir nuevamente a su musa de aquellos años Kirsten Dunst (Claudia en Entrevista con el Vampiro), donde su interpretación guste o no; sin lugar a dudas era la actriz que debía desarrollar dicho personaje.
Aunque ya sabemos que todo transcurre en el siglo XVIII, su directora logra plasmar toques modernos tan excepcionales como la inolvidable escena donde aparecen zapatillas converse o la fiesta de mascaras con música de «SIOUXSIE AND THE BANCHEES» y la canción «HONG KONG GARDEN»
La fotografía es otro gran protagonista y pese que la dirección de arte y vestuario obviamente respetan los outfits de aquellos tiempos «MARIA ANTONIETA» logra equilibrar la cultura pop con ciertos toques de grunge, punk y new wave.